Esta salsa además de sencilla es un plato bien sabroso. En casa ya sabéis que somos unos apasionados de las salsas, sobretodo porque dan muchísimo juego a los platos y en casa todo lo que sea mojetear pan no lo perdonamos. Hoy una salsa de champiñones que puede acompañar perfectamente carne, pescado o pasta, una receta tan sencilla como deliciosa.
Nosotros hoy la hemos preparado con pollo y un poco de arroz pero como os decimos, acompaña perfectamente, pasta, cualquier carne o pescado. Así que vamos a allá.
Necesitaremos para 2 personas:
- 200 gr de champiñones
- 350 ml de crema de leche
- 1 cebolla
- Sal, pimienta, ajo
- Aceite
- Picamos la cebolla y el ajo bien fino.
- En una sartén ponemos un poquito de aceite y ponemos a pochar la cebolla y el ajo.
- Dejamos que se poche bien e incorporamos los champiñones que habremos cortado en láminas finas que se doren bien.
- Cuando tengamos los champiñones cocidos incorporamos la crema de leche y dejamos cocer un poco.
- Removemos bien y pasamos por la túrmix.
- La textura no debe ser ni muy espesa ni muy líquida. En nuestro caso, si lo preparamos de un día para otro acostumbramos a dejarla con una textura más líquida porque al conservarla en el frigorífico de un día para otro y cuando la calentamos ya se espesa un poco y así podemos degustarla con la textura perfecta.
Consejo:
- Los champiñones si los compráis enteros les cortamos el tallo bien corto, para lavarlos los ponemos en un bol con agua y sal para que saquen toda la arena y suciedad.
- Desechamos el agua de los champiñones y los secamos bien y cortamos a rodajas. Si cortamos los champiñones con mucha antelación por cuestión de tiempo, antes de cortarlos tendréis que untar con medio limón cada champiñón para evitar su oxidación y que no se ennegrezcan.